El proyecto del campus
Para el diseño del proyecto de la Universidad Pública de Navarra, Sáenz de Oiza tomó como ejemplo varias universidades con organización departamental, especialmente Bruselas y Grenoble. Creó así un campus formado por edificios especializados por funciones, con vías de comunicación directa entre unos y otros. Estas vías, utilizando pasarelas que unían los distintos edificios a la altura del primer piso, finalmente no se construyeron.
Tomando como modelo de planta y dimensiones el céntrico Paseo de Sarasate de Pamplona, Oiza diseñó el campus en torno a un eje formado por los edificios del aulario, la biblioteca y el rectorado, con los departamentos, talleres y resto de edificios alrededor.
En el proyecto original estaba prevista la construcción de un aula magna o paraninfo —edificio subterráneo situado frente al rectorado y que recibía luz cenital mediante un destacado cuerpo troncocónico de vidrio— y de un centro de cálculo, pero finalmente no se construyeron.